Con A de Fresa
viernes, 24 de junio de 2011
Quiero más capítulos en mi libro
viernes, 7 de enero de 2011
Gamofobia
domingo, 2 de enero de 2011
Un 2010 que no puedo definir
lunes, 4 de octubre de 2010
Por un tubo...
Vida...
martes, 14 de septiembre de 2010
La historia de mi vida
Recuerdo aquella mañana, la vi pasar por la puerta de aquel salón. Jamás había notado tal belleza en una mujer hasta ese día. Recuerdo que yo tenía 16, ella también, cabello castaño rizado, ojos café, no sabía su nombre. Debía saberlo.
Me sentaba todas las mañanas en el mismo lugar, solo para verla. Yo moría por ella, ella no sabía quien era yo. Un amigo en común se enteró de lo que me ocurría y nos presentó. Ella nunca supo lo que yo sentía. Era la primera vez que experimentaba algo así y no supe que hacer
Luego conocí a Cristina. Rubia, ojos claros, universitaria igual a mí, solo que un poco más avanzada. Ella 20 y yo 17, siempre me pregunté que hacía ella con alguien como yo, aunque la verdad, teníamos mucho en común. La amé como a nadie había amado, sentía que daba la vida por la relación. Ella me enseñó todo lo que yo debía saber sobre el amor y cómo hacerlo. Una tarde, su ex había regresado con el arrepentimiento en los ojos. Yo, un pichón saliendo de su cáscara no tenía nada que ofrecerle.
Jure más nunca enamorarme, no podría soportar algo así de nuevo. Esa sensación de adolescente enamorado por la que todos pasamos, creí que jamás volvería.
Hace dos semanas, te miré a los ojos y vi a alguien que no conocía, a pesar de que crecí contigo. Fue como amor a primera vista, un poco diferente al parecer. La sensación fue igual a la que siente una niña con Barbie nueva, o la de un niño con monopatín. Lástima que a mis padres deba decirle que eres una amiga más. Mi madre moriría si le digo que, aquella con quien jugué muñecas y le enseñé a maquillarse, se ha convertido en el amor de mi vida.
Una crónica para la universidad.
miércoles, 1 de septiembre de 2010
... Y se repite la historia.
Me alegra que al presentarlas, se hayan convertido en una para la otra, que hoy se amen como jamás pudiste soñar con amarme, pero no es la primera vez que presento a mi "actual" y a su "futura" como mi amiga.
Mientras más ocurre más pienso en cuando será el día que deje de escuchar "ella es la amiga que nos presentó" o "yo andaba con ella cuando nos conocimos" y sea yo quien lo diga. Me gustaría estar del otro lado.
Espero algún día la cosa no vuelva a repetirse, porque esto de alegrarme por la felicidad de otros y no conseguir mi propia felicidad está dejando de parecerme lindo.
lunes, 9 de agosto de 2010
No debe ser muy difícil conseguirlos...
- Una rana de chocolate, donde el mago no se vaya del cromo
- Una manzana envenenada, para dormir hasta que aparezcas
- La zapatilla de cristal, pero que un príncipe no la consiga, simplemente no creo en principes
- Un giratiempo, para no volver a decir "coooño, que habría pasado si.."
- Una alfombra, para volar
- Un gato que no me pertenezca, simplemente me gustan.
- Un boleto al lugar de los sueños, el del gato sonriente, la reina malvada y el conejo que celebra el "no cumpleaños"
- Un bolso, donde quepan todas mis cosas
- Un Volswagen que me entienda
- Un par de jeans que hagan que las cosas sucedan
- A alguien como Shane
- Partir del andén 9 3/4 a un lugar donde pertenezca...
viernes, 18 de junio de 2010
Sangrando por la herida
viernes, 16 de abril de 2010
Querida recién mayor de edad:
Lo segundo, es que I feel your pain, your hopelessness, despair and desperation. En esta ciudad los hombres no quieren servir para nada. Lo bueno, es que tienes un chance súper valioso de conocerte y quererte por quien eres. Lo malo, es que con el tiempo, la vaina no mejora a menos de que tengas full suerte.
Lo tercero, es que la única que puede cambiar su futuro eres tú: inscríbete en el Registro Electoral Permanente, para que nadie tome decisiones por ti. Si no votas, no puedes quejarte.
PD: termínale a ese huevón y sal a joder, que estás en la edad! Muaks.